Los discos SSD son rápidos, no muy grandes y funcionan bastante bien. Aunque seguramente su mayor posibilidad de mejora se encuentre ahora mismo en su elevado precio, en InnoDisk han decidido optar por reducir aún más el tamaño de estos discos hasta volverlos ridículamente pequeños con el nanoSSD de 128GB presentado estos días en la Computex 2009.
Además de su más que reducido tamaño, para que comprobemos que no se trata de una caja vacía, InnoDisk ha instalado en su puesto en la feria uno de estos discos enganchado a una placa base a la que se le aplicaban fuertes sacudidas. Y, al parecer, seguía funcionando.
fuente: gizmos
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